La embolización de miomas uterinos se ha consolidado como la mejor alternativa para tratar este padecimiento, ya que permite conservar el útero y mejorar significativamente los síntomas mediante una técnica mínimamente invasiva.
Durante este procedimiento, se emplean microesferas para bloquear de forma precisa las arterias que alimentan a los miomas. Estas pequeñas partículas son fundamentales para lograr el objetivo de detener el suministro de nutrientes que los mantiene activos. Si estás considerando una opción sin cirugía, te invitamos a conocer más sobre cómo actúan las microesferas en tu cuerpo.
¿Qué son las microesferas?
Las microesferas son partículas esféricas de tamaño microscópico, elaboradas con materiales biocompatibles como gelatina o alcohol polivinílico. Su función es bloquear de forma dirigida las arterias que nutren a los miomas. Al impedir el paso de oxígeno y nutrientes, los miomas pierden vitalidad, lo que favorece su reducción y el alivio de los síntomas que generan.
Estas microesferas están diseñadas para ser lo suficientemente pequeñas como para desplazarse a través del catéter, pero lo bastante grandes como para obstruir con precisión los vasos sanguíneos que nutren al mioma. Gracias a esta precisión, el tejido sano del útero se mantiene funcional y sin daño.

¿Cómo actúan las microesferas en tu cuerpo?
Durante la embolización, un radiólogo intervencionista accede a la arteria femoral o radial mediante una punción pequeña e indolora. Luego, introduce un catéter que navega por las arterias hasta llegar a las ramas uterinas que alimentan a los miomas. A través de este catéter se liberan las microesferas, que se alojan en los vasos que abastecen a los miomas interrumpiendo su irrigación.
Al quedar bloqueado el flujo, los miomas comienzan a reducirse y los síntomas como sangrados abundantes, presión pélvica o dolor disminuyen notablemente con el paso del tiempo. Las microesferas actúan de forma precisa, permitiendo que el útero conserve todas sus funciones.
Es importante destacar que estas microesferas no pueden desplazarse a otras partes del cuerpo. Su diseño y el control radiológico durante el procedimiento aseguran que se depositen únicamente en los vasos que nutren los miomas. Además, el calibre de los vasos y la técnica empleada impiden que las partículas migren a otros órganos, lo que garantiza su efectividad y seguridad.
Beneficios de la embolización de miomas uterinos con microesferas
La aplicación de microesferas en la embolización ofrece numerosos beneficios:
● Procedimiento mínimamente invasivo: No requiere incisiones, lo que reduce riesgos y permite una recuperación más rápida.
● Conservación del útero: A diferencia de la histerectomía, se mantiene intacto el órgano reproductivo, ideal para mujeres que desean preservar su fertilidad o su anatomía.
● Recuperación rápida: Muchas pacientes pueden volver a sus actividades en un periodo de 5 a 10 días.
● Alivio de los síntomas: Reducción notoria de sangrado menstrual, presión abdominal y dolor pélvico.

Conclusión
Las microesferas utilizadas en la embolización de miomas uterinos permiten una opción efectiva y menos agresiva para quienes desean evitar una cirugía mayor. Su capacidad para bloquear selectivamente las arterias que alimentan a los miomas, sin comprometer el tejido sano del útero, representa un avance médico importante que transforma la experiencia de las pacientes.
Si estás buscando una solución que preserve tu útero, alivie tus síntomas y te permita retomar tu vida rápidamente, la embolización con microesferas puede ser la opción ideal para ti. Agenda una consulta con nuestros especialistas en Miomas Sin Cirugía y recibe información clara y personalizada para tomar la mejor decisión para tu salud